Érase una niña que fue a visitar a su padre, en la época de las dictaduras en Uruguay, a la cárcel. Fue a visitar, como decíamos, a su padre a la cárcel, a la que no dejaban pasar dibujos ni de flores, ni de mariposas, ni de pájaros o aves.
En esto que le confiscan unos dibujos de pájaros o aves voladoras: "no te preocupes papá" dice ella. "Tranquila hijita", contesta él.
La siguiente vez que visita la penitenciaría, la niña le dibuja a su padre unos árboles frutales con sus frutos y esto lo dejan pasar los guardianes.
Dice el padre: "¿Qué es esto hijita, cerezos, ciruelos, nísperos, albaricoques o melocotones?" Ella contesta: "¡Tonto, son los ojos de todos los pájaros que te he traído!"
MORALEJA de Einstein: La imaginación es más importante que el conocimiento (sin dejar de lado la extraordinaria importancia del conocimiento, que por ende es la base de la imaginación, así como la filosofía clásica es la madre de la ciencia y esta, a su vez, de las modernas y postmodernas tecnologías.
J. A. F.
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